Pasaron tal vez unos 12 años.



Siempre he recordado que pasamos un verano hablando por teléfono a diario. No se muy bien de que, pero creo recordar que ya por entonces a los dos nos apasionaba el cine. No se como llegamos a eso, en esa época sin móviles... sólo se que siempre me pareciste extremadamente inteligente y sumamente sexy.

Han pasado más de 10 años y nos ha hecho falta un café, un par de horas y cuatro mensajes para dejar claro que nada ha cambiado. Yo me he perforado un poco, me he tatuado y soy un tanto más políticamente incorrecta. Tu has crecido y ahora cuando hablas de cine sabes más, escoges mejor las palabras, analizas los guiones, te fijas en el sonido, en las cámaras y sobre todo, lo explicas con una pasión y una media sonrisa que es... cuanto menos, cautivadora.

Y poniéndonos al díá, en ese café con poca luz y mucha conversación, de repente a mi me venía la imagen de Melinda y Melinda, conversando sobre como cada uno ve la vida. Y tengo que decir me encanta que a ti también te apetezca repetir y redescubrir.

0 comentarios:

Publicar un comentario